El polo enológico del Valle de Traslasierra resguarda una propuesta más que interesante para conocer. Se trata de la bodega Noble de San Javier, que incluye una bella hostería con increíbles vistas a los viñedos.
La elección del lugar no fue casual. En 2001, la familia Jascalevich eligió este terruño de San Javier por sus particulares características: una altura óptima de 900 msnm, un suelo virgen y la ausencia de cultivos aledaños. Una biodiversidad intacta que hace de este un lugar excelente para elaborar un vino sano y muy frutado.
En las tres hectáreas de viñedos, se utilizan métodos orgánicos y biodinámicos para el manejo del cultivo. Esto significa que los vinos buscan transmitir la esencia de la tierra en su versión más honesta, y que la finca es vista de manera integral, como un ser vivo donde conviven plantas, animales, el monte natural y un equipo humano.
Se siembran y cosechan cepas de Malbec, Cabernet Sauvignon, Syrah y Merlot. Su vino destacado es el Noble de San Javier Merlot; sin embargo, también su Malbec y Blends han obtenido medallas de oro y plata en numerosos concursos internacionales.
Degustación enológica
Esta bodega abre sus puertas y ofrece sin cargo un servicio de visita guiada por el viñedo. Además, se puede disfrutar de una experiencia enológica única con degustación y picada incluida.
Si se desea ir en grupos, se sugiere consultar con anticipación.
