Como complemento de las jornadas de río que regala Mina Clavero, existen varios museos que merecen una visita.
Para comenzar el recorrido, una parada obligatoria es el museo Piedra Cruz Sur, el primero que se originó en la zona. En él se exponen, en muestras rotativas, más de 2000 piezas minerales y geodas de todo el mundo. Además, cuenta con un espacio educativo y recreativo. Aquí, los niños pueden hacer dibujos, observar a través de caleidoscopios y aprender más sobre la formación de las piedras en la naturaleza.
Una segunda opción, esta vez para los amantes de las plantas, es el Museo de Cactus. En una visita guiada, se pueden observar diversas especies de todo el mundo de esta peculiar planta. Los hay de todos los tamaños, formas y colores. A su vez, destacan los que provienen de México y Brasil. Algunos, monstruosos, llegan a tener hasta un metro y medio de diámetro. Dentro del museo no podía faltar el Cardón, uno de lo más tradicionales.
Colecciones e historia
Por su parte, otro imperdible es el Museo Arqueológico Comechingón. ¿Qué se puede encontrar en él? Estatuillas, puntas de flecha y otros elementos, provenientes desde el periodo ayampitín hasta la época colonial. Como complemento, se brindan charlas sobre el pasado de las sierras de Córdoba y el legado de los pueblos comechingones que vivieron en la zona.
Por último, un proyecto original es la colección que presenta el Museo de Municiones. En total hay 1300 municiones, una mina submarina de la Segunda Guerra Mundial y balas de cañón de la Vuelta de Obligado, entre las piezas más importantes.
