Colonia Caroya
Colonia Caroya es un destino ideal para aquellos que quieran descansar, estar en pleno contacto con la naturaleza y disfrutar de una excelente gastronomía.
Alrededor de sus áreas rurales corren acequias que proveen de agua a toda la producción caroyense, destacada a nivel nacional por sus salames caseros, sus quesos y sus vinos de excelente calidad. Así, un imperdible en este enclave será visitar las bodegas y los viñedos que forman parte del Camino del Vino en Córdoba.
Cultura e imanes religiosos
A los sabores se suman pintorescos paseos culturales, que invitan a descubrir las costumbres de los primeros italianos que fundaron el poblado.
A su vez, vale la pena visitar la Estancia Jesuítica de Colonia Caroya. Declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO (2000), fue el primer establecimiento agrícola-ganadero organizado por la Compañía de Jesús en 1616, lo que la hace una parada infaltable. Si se desea continuar el circuito religioso, podrán sumarse otras capillas y oratorios.
Rincones pintorescos
Entre sus paisajes resalta la avenida San Martín –conocida como “Calle Ancha”–, que resguarda el Monumento al Inmigrante. Por su parte, la plaza Nicolás Avellaneda es el principal espacio verde y recreativo de Colonia Caroya, elegido para emplazar carnavales y festivales.
Más información
Cómo llegar: desde la ciudad de Córdoba se toma la RN 9 norte, pasando la Estación Juárez Celman y General Paz. En colectivo, se puede ir con la empresa Fonobus.
Dónde hospedarse: la propuesta incluye hoteles, residenciales, albergues, campings y alojamientos rurales.
Gastronomía: es la tierra de los mejores salames, a los que se suman otros chacinados, vinos artesanales, conservas y pastas caseras. Sus restaurantes son imperdibles.